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Aguilucho Ferruginoso

Con sus llamativas alas de color óxido y su tama?o majestuoso, el Aguilucho Ferruginoso domina los cielos abiertos de las praderas de América del Norte. Este formidable rapaz utiliza su aguda vista para cazar peque?os mamíferos, desempe?ando un papel crucial en el mantenimiento del equilibrio del ecosistema. Un verdadero centinela de las praderas.

2.041 kg
Peso
Longitud: 56 - 69 cm
tamaño
241.401 km/h
Velocidad máxima
Preocupación menor
Estado de conservación
Aumentando
Tendencia poblacional
Características
El Aguilucho Ferruginoso (Buteo regalis) es el halcón más grande de América del Norte, conocido por su plumaje de color óxido, amplias alas y poderosa constitución. Prefiere las praderas abiertas y los pastizales áridos, es un cazador hábil, a menudo visto planeando o posado en lugares altos para avistar presas. Se alimenta principalmente de peque?os mamíferos.
Rango de distribución de Aguilucho Ferruginoso
Buteo regalis, comúnmente conocido como el Aguilucho Ferruginoso, es nativo de América del Norte. Su distribución geográfica incluye principalmente el oeste de los Estados Unidos, el sur de Canadá y el norte de México. Las áreas clave incluyen las Grandes Llanuras, regiones intermontanas y varios estados occidentales como Montana, Colorado, Wyoming y hacia el sur hasta Texas y Arizona.
Hábitat de Aguilucho Ferruginoso
Condiciones ambientales
El Aguilucho Ferruginoso habita típicamente en paisajes abiertos, prefiriendo praderas, matorrales y desiertos. Prospera en climas áridos a semiáridos, a menudo se encuentra en áreas con espacios amplios y abiertos que facilitan la caza. El clima en estas regiones varía desde inviernos fríos hasta veranos calurosos, con precipitaciones moderadas.
Nicho ecológico
Como depredador superior, el Aguilucho Ferruginoso juega un papel crucial en el control de las poblaciones de peque?os mamíferos, que constituyen su presa principal. Está bien adaptado para cazar en campos abiertos y a menudo se lo ve planeando a gran altura. La especie exhibe algunas adaptaciones regionales, como variaciones en los sitios de anidación, que pueden variar desde bordes de acantilados hasta árboles aislados o incluso estructuras artificiales en campos abiertos.