Calidris alpina, comúnmente conocido como el Correlimos Común, se encuentra principalmente en las regiones costeras del Hemisferio Norte. Su distribución geográfica se extiende a través de América del Norte, Europa y Asia. Durante la temporada de cría, se puede encontrar al Correlimos Común en regiones árticas y subárticas, incluidas el norte de Europa (particularmente Escandinavia e Islandia), el norte de Rusia, Alaska y Canadá. En la temporada no reproductiva, su rango se extiende a áreas costeras de todo el mundo, como las costas occidental y oriental de los Estados Unidos, Europa occidental, el Mediterráneo, el Medio Oriente y partes de Asia, incluyendo India y el sudeste asiático.

El Correlimos Común habita típicamente humedales costeros, estuarios y planicies de lodo durante la temporada no reproductiva, donde puede encontrar abundantes fuentes de invertebrados para alimentarse. Prefiere ambientes con barro o arena blanda que permitan sondear y alimentarse. Durante la temporada de cría, los Correlimos Comunes se trasladan a entornos de tundra ártica caracterizados por campos húmedos, áreas musgosas y eriales que ofrecen tanto sitios de anidación como disponibilidad de alimentos.

Como ave limícola, el Correlimos Común juega un papel crucial en el control de las poblaciones de invertebrados dentro de su hábitat. Contribuye al ciclo de nutrientes y apoya el equilibrio ecológico dentro de los ecosistemas de humedales y costeros. Sus patrones migratorios también significan que conecta varios ecosistemas a través de los continentes, siendo parte de una dinámica poblacional de aves migratorias más amplia. Las variaciones en el hábitat son evidentes entre sus subespecies, que pueden mostrar adaptaciones a condiciones locales más específicas, como diferencias de altitud o variaciones de temperatura en diferentes partes de su distribución.