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Zebroide

El zorse, una sorprendente mezcla de cebra y caballo, exhibe llamativas rayas en un cuerpo similar al de un caballo. Este raro híbrido prospera en hábitats gestionados, destacando su linaje único. Con los instintos salvajes de la cebra y la constitución del caballo, el zorse cautiva con su fuerza y apariencia distintiva.

15-30 años
Esperanza de vida
227.0 - 450.0 kg
Peso
Altura: 1.3 - 1.63 m
tamaño
1-2 años
Edad de madurez sexual
5-6 meses
Edad de destete
64.3736 km/h
Velocidad máxima
Características
La descendencia híbrida de la cebra (Equus zebra) y el caballo (Equus caballus), comúnmente conocida como zorse, exhibe una mezcla de rasgos de ambos padres. Típicamente, tiene el distintivo patrón de rayas de una cebra con la forma y constitución de un caballo. Los zorses suelen ser estériles y se crían por su apariencia única. Se pueden encontrar en entornos controlados, como zoológicos o parques de vida silvestre, en lugar de en estado salvaje. Conocidos por su fuerza y resistencia, los zorses son menos dóciles que los caballos, heredando la naturaleza más impredecible de la cebra.
Rango de distribución de Zebroide
La especie Equus zebra x Equus caballus, comúnmente conocida como híbrido de cebra y caballo o 'zorse', no es una especie que ocurra naturalmente en estado salvaje. Como híbrido, no tiene una región nativa donde se encuentre de manera natural. En su lugar, los zorses generalmente se crían en cautiverio con propósitos específicos como investigación, exhibiciones en zoológicos o colecciones privadas.
Hábitat de Zebroide
Condiciones ambientales
Dado que los zorses se crían en cautiverio, no tienen un hábitat natural específico. Sin embargo, generalmente se mantienen en entornos que simulan las condiciones adecuadas para ambas especies progenitoras, cebras y caballos. Esto incluye climas templados con acceso a campos abiertos o pastizales para pastar, así como refugios para protegerse de condiciones climáticas extremas.
Nicho ecológico
Los zorses no ocupan un nicho ecológico específico en la naturaleza debido a su condición de híbridos. En cautiverio, sus necesidades son similares a las de caballos y cebras, requiriendo una dieta equilibrada, espacio para hacer ejercicio e interacción social. No desempe?an un papel en los ecosistemas naturales ya que no se encuentran en estado salvaje.