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Elefante de la Sabana Africana

El majestuoso elefante de la sabana africana es una especie clave, moldeando su entorno al desarraigar árboles y crear caminos. Notable por su inmenso tama?o e inteligencia, este gigante amable utiliza su hábil trompa para alimentarse, socializar y cuidar de su manada, personificando el espíritu de la naturaleza salvaje africana.

60-70 años
Esperanza de vida
3600.0 - 5400.0 kg
Peso
Altura: 3.0 - 3.5 m
tamaño
11-20 años
Edad de madurez sexual
6-18 meses
Edad de destete
40.2335 km/h
Velocidad máxima
Características
El elefante de la sabana africana (Loxodonta africana africana) es el animal terrestre más grande, con machos que pesan hasta 12,000 libras. Conocidos por sus grandes orejas, que ayudan a regular la temperatura corporal, y sus largas trompas utilizadas para la comunicación y el forrajeo, habitan sabanas, bosques y desiertos en toda áfrica.
Rango de distribución de Elefante de la Sabana Africana
El elefante de la sabana africana (Loxodonta africana africana) es nativo del áfrica subsahariana. Se encuentra principalmente en 37 países a lo largo del continente, incluidos Botsuana, Zimbabue, Kenia, Tanzania, Zambia y Sudáfrica. Estos elefantes están distribuidos a través de varios ecosistemas desde los bosques de áfrica Occidental hasta las sabanas y praderas del Este y Sur de áfrica.
Hábitat de Elefante de la Sabana Africana
Condiciones ambientales
Los elefantes de la sabana africana habitan una variedad de entornos, incluidos sabanas, praderas y bosques. Son altamente adaptables y pueden prosperar en hábitats que van desde desiertos áridos hasta exuberantes selvas tropicales. Las condiciones ambientales típicas incluyen un clima tropical a subtropical con variaciones estacionales en las precipitaciones, que van de estaciones secas a húmedas, lo que influye en sus patrones de movimiento y forrajeo.
Nicho ecológico
Los elefantes de la sabana africana desempe?an un papel crucial como especies clave en sus ecosistemas. Son consumidores primarios e influyen en la estructura de su entorno a través de sus hábitos alimenticios que incluyen ramoneo en árboles y arbustos y pastoreo de hierbas. Este comportamiento ayuda a mantener los ecosistemas de sabana y bosque, promoviendo la biodiversidad. También facilitan la dispersión de semillas y crean pozos de agua utilizados por otros animales durante los períodos secos.