El tejón de miel, conocido por su temperamento feroz, habita en una amplia gama de entornos a lo largo de áfrica, el suroeste de Asia y el subcontinente indio. Presenta una complexión robusta, piel gruesa y garras afiladas, lo que le permite ser un depredador y carro?ero formidable. Notorio por su falta de miedo, puede defenderse de depredadores más grandes.

Mellivora capensis, comúnmente conocido como el tejón de miel, es nativo de áfrica, Oriente Medio y el subcontinente indio. Su distribución geográfica incluye países en toda áfrica subsahariana, extendiéndose a partes de la península arábiga e India. Notablemente, la especie se extiende desde Marruecos y Senegal en el oeste hasta Sudáfrica en el sur, y hacia el este hasta Eritrea, Etiopía y Somalia. En el Medio Oriente, se encuentra en países como Arabia Saudita, Yemen y Omán, mientras que en el sur de Asia, está presente en India y partes de Pakistán.

El tejón de miel habita en una variedad de ambientes, incluidos bosques secos, sabanas, praderas e incluso regiones monta?osas hasta 2600 metros sobre el nivel del mar. Es altamente adaptable a diferentes climas, desde desiertos cálidos hasta áreas más templadas. La especie generalmente evita las selvas densas y prefiere áreas abiertas o ligeramente boscosas donde puede forrajear eficazmente.

Como mamífero carnívoro, el tejón de miel es un alimentador oportunista con una dieta que incluye peque?os mamíferos, aves, insectos y reptiles, así como miel, por la que es famoso por asaltar colmenas. Desempe?a un papel crucial en su ecosistema al controlar las poblaciones de sus presas y facilitar la dispersión de semillas a través de sus actividades de forrajeo. El tejón de miel es conocido por su notable resiliencia y adaptabilidad, a menudo prosperando en entornos desafiantes debido a su naturaleza intrépida y tenaz.