La cobra real, Ophiophagus hannah, es la serpiente venenosa más larga del mundo, alcanzando hasta 18 pies. Se encuentra en bosques desde India hasta el sudeste asiático, y preda principalmente sobre otras serpientes. Su distintivo capuchón y potente veneno neurotóxico la convierten en un depredador formidable, aunque a menudo evita el contacto humano.

Ophiophagus hannah, comúnmente conocida como la cobra real, es nativa del sur y sureste de Asia. Su distribución geográfica incluye países como India, Bangladesh, Bután, Myanmar, Camboya, el sur de China, Laos, Malasia, Indonesia, Nepal, Filipinas, Tailandia y Vietnam.

La cobra real habita típicamente en una variedad de entornos que van desde densos bosques de monta?a hasta llanuras abiertas. Se encuentra comúnmente en selvas tropicales y subtropicales, manglares, matorrales de bambú y áreas agrícolas. La especie prefiere ambientes húmedos con abundante cobertura y se encuentra a menudo cerca de cuerpos de agua.

Como depredador superior, la cobra real desempe?a un papel crucial en el control de la población de sus presas, compuestas principalmente por otras serpientes, incluidas especies venenosas. Su nicho ecológico se extiende al ser un depredador ápice dentro de su hábitat, ayudando a mantener el equilibrio del ecosistema al regular las poblaciones de presas. La cobra real también es conocida por su comportamiento único de construir nidos para sus huevos, lo cual es poco común entre las serpientes.