El leopardo del Amur (Panthera pardus orientalis) está en peligro crítico de extinción, es nativo de los bosques del Lejano Oriente ruso y partes de China. Es conocido por su grueso y hermoso pelaje, rosetas distintivas y largas patas, adaptadas al terreno nevado. Este depredador solitario es un ágil trepador y caza principalmente ciervos y liebres.

El leopardo del Amur (Panthera pardus orientalis) es nativo de los bosques templados del Lejano Oriente ruso, específicamente en la región de Primorsky Krai. También se encuentra en la provincia de Jilin en el noreste de China, y ha habido avistamientos históricos en la península de Corea, aunque su presencia allí ahora es incierta.

El leopardo del Amur habita en ambientes de bosques templados caracterizados por inviernos fríos y veranos suaves. Estas áreas experimentan una significativa nevada durante los meses de invierno, y los leopardos están adaptados a estas duras condiciones. Los bosques son típicamente mixtos, consistiendo de árboles caducifolios y coníferos, proporcionando tanto cobertura como oportunidades para cazar.

Los leopardos del Amur ocupan un nicho ecológico como depredadores ápice dentro de su hábitat. Principalmente cazan ungulados como el ciervo de Manchuria y el ciervo sika, pero su dieta también puede incluir liebres, tejones y peque?os roedores. Este leopardo está bien adaptado a su entorno, con un pelaje grueso adecuado para climas fríos y una naturaleza solitaria que le permite cubrir grandes territorios en busca de alimento. Depende de la densa cobertura forestal para acechar a sus presas y evadir a otros depredadores.