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Culebra de Jarretera Ajedrezada

La Culebra de Jarretera Ajedrezada, con su llamativo patrón ajedrezado de verde y negro, prospera en los humedales del suroeste de Estados Unidos. Esta ágil serpiente no venenosa desempe?a un papel crucial en el control de las poblaciones de anfibios, mostrando un fascinante juego de camuflaje y depredación.

Bas
Agresión
Preocupación menor
Estado de conservación
Desconocido
Tendencia poblacional
Características
Thamnophis marcianus, comúnmente conocida como la Culebra de Jarretera Ajedrezada, se encuentra en campos de hierba y humedales del suroeste de los Estados Unidos y México. Presenta un patrón ajedrezado distintivo de cuadrados verdes y negros a lo largo de su espalda. Esta serpiente no venenosa es diurna y se alimenta de anfibios y peque?os peces.
Rango de distribución de Culebra de Jarretera Ajedrezada
Thamnophis marcianus, comúnmente conocida como la Culebra de Jarretera Ajedrezada, es nativa de América del Norte. Se encuentra principalmente en el suroeste de los Estados Unidos, particularmente en estados como Texas, Nuevo México y Arizona. Su rango se extiende hasta el norte de México, incluyendo regiones como Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas.
Hábitat de Culebra de Jarretera Ajedrezada
Condiciones ambientales
La Culebra de Jarretera Ajedrezada habita típicamente en una variedad de entornos. Se encuentra a menudo en regiones semiáridas, prefiriendo áreas cercanas a fuentes de agua como arroyos, estanques y ríos. Estos entornos proporcionan la humedad necesaria y la disponibilidad de presas. El clima en estas regiones puede variar, pero generalmente incluye veranos calurosos e inviernos suaves.
Nicho ecológico
Como serpiente semiacuática, Thamnophis marcianus ocupa un nicho donde puede explotar tanto presas terrestres como acuáticas. Se alimenta principalmente de anfibios, peces y peque?os invertebrados. La capacidad de la serpiente para prosperar en diversos entornos como praderas, desiertos y zonas ribere?as demuestra su adaptabilidad. Las variaciones en el hábitat pueden ocurrir debido a adaptaciones regionales, donde algunas poblaciones pueden ser más terrestres o acuáticas dependiendo de las condiciones locales.